El cuernito: testigo de una historia culinaria.
Los momentos compartidos alrededor de una mesa, disfrutando de la buena compañía y de sabores que nos hacen sentir en casa, siempre guardan un lugar especial en el corazón. ¿Y qué mejor manera de hacerlo que con los deliciosos cuernitos de La Concha Bakery?
El cuernito es el complemento perfecto para compartir momentos de amor, ya sea que quieras sorprender a esa persona especial con un rico desayuno acompañado de café o como un aperitivo para la noche de películas con la familia y amigos, convirtiendo cada bocado en un recuerdo de alegría.
¿Alguna vez te has preguntado de dónde provienen esas suaves texturas y ricos sabores que lo hacen tan característico? Nosotros, como tú, somos amantes de la historia, así que decidimos indagar sobre el origen del cuernito. En este blog, te llevaremos a descubrir el origen de este delicioso pan.
Nos adentramos en un viaje a los rincones de la historia de la panadería. Se cree que el exquisito cuernito tuvo sus primeros destellos en Viena, Austria, durante el siglo XVII, sin embargo, su popularidad se consolidó en Francia a finales del siglo XIX.
El cuernito, conocido también como "croissant" del francés "creciente" debido a su característica forma, alcanzó su máximo esplendor en las calles de París, donde adquirió su inconfundible textura y sabor que lo catapultaron a la fama mundial, conquistando los paladares más exigentes del mundo.
El croissant, símbolo de la pastelería francesa, trajo consigo su encanto y sabor hasta tierras mexicanas a través de un viaje que se remonta al período de la Segunda Intervención Francesa en el siglo XIX. Durante este tiempo, México se vio influenciado por el estilo europeo en diversos aspectos, desde la moda hasta la gastronomía.
En particular, el gobierno de Porfirio Díaz destacó por su interés en promover la cultura europea. Esto no solo abrió las puertas a una ola de influencia europea, sino que también atrajo a chefs y cocineros franceses, quienes llegaron a la capital para dejar su marca en la cocina mexicana, estableciendo cafés y restaurantes. De esta manera, el croissant, con su sabor inconfundible y su legado histórico, encontró un nuevo hogar en México, donde lo apodamos cariñosamente como ‘cuernito’.
El cuernito nos recuerda que la gastronomía es mucho más que una simple combinación de ingredientes; es un reflejo de nuestra identidad, de nuestra historia y de nuestra capacidad para fusionar lo mejor de cada cultura en un solo bocado.
Así que la próxima vez que disfrutes de este delicioso pan de La Concha Bakery, tómate un momento para saborear no solo su exquisito sabor, sino también la historia que se encuentra entre cada capa de su suave masa.
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